El Barcelona sufrió un duro revés en el Trofeo Joan Gamper, al caer 0-3 ante el Mónaco. A pesar de dominar el juego y crear varias ocasiones, los culés volvieron a mostrar las mismas debilidades defensivas y falta de efectividad que los afectaron la temporada pasada. El gol anulado a Raphinha antes del descanso fue el preludio de una segunda mitad en la que los errores defensivos permitieron que el Mónaco se adueñara del marcador.
El equipo dirigido por Hansi Flick no supo reaccionar tras el primer gol, y pronto el Mónaco amplió la ventaja con un tanto de Embolo tras un pase de Minamino. A pesar de la entrada de Lamine Yamal, que intentó revitalizar al equipo, el Barcelona no logró encontrar el camino al gol, y el 0-3 definitivo llegó con otro fallo defensivo que Mawissa aprovechó para sentenciar el partido.
Esta derrota, en un partido que debía servir para animar al equipo y a la afición antes del inicio de la Liga, deja muchas dudas sobre el estado del Barcelona. Con el primer encuentro de la temporada en Mestalla a la vuelta de la esquina, los azulgranas deberán hacer ajustes rápidamente si quieren evitar un comienzo en falso.
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